Rural Tex es un estúpido portal web de noticias y reseñas sobre videojuegos y cine popular. Combatiendo el mal gusto desde 2005 (nos está costando mucho) Influenciados por nuestra cultura geek de Comic Books & Gaming, hacemos Periodismo Gonzo de tercera en este 'Colosal Desperdicio de Ancho de Banda'

En los 90's era común encontrar buenos juegos dentro del género Beat'em Ups o Brawlers como posteriormente se les conoce. Vienen desde los tiempos más primitivos del Apple II con Karateka, para consagrarse en los Arcades noventosos de 16-Bit con las leyendas de Golden Axe, Double Dragon y Streets of Rage. De corte lineal, 2D sprites y en modo side-scrolling, fueron el epicentro de los primeros juegos multijugador –offline– en super mega gabinetes que llegaron a tener cuatro y hasta seis estaciones con pantallas unidas: The Simpsons y X-Men fueron un par de esos megagabinetes multiplayer cooperativo que resaltaron. Pero con la masificación de las consolas al final del siglo se desvanecieron los Arcades y con ellos esta peculiar experiencia que rara vez resurge como un nicho.

Hace 10 años Ubisoft se reune con Bryan Lee O'Malley, creador del la serie comic indie "Scott Pilgrim" para llevar su popular literatura gráfica a videojuego a la vez que Universal lo adaptaba al cine. El juego terminó replicando al film como un clásico brawler co-op llamado "Scott Pilgrim vs. The World" (PS3/X360), que se terminó por convertir –junto a la película– en el fenómeno cultural del momento. Scott Pilgrim vs. The World revivió ese espíritu perdido de los clásicos brawlers de los noventa con especial atención a sus gráficas retro 16-bit, pero en parte también por el soundtrack de la banda neoyorquina Anamanaguchi. Tiempo después el videojuego desapareció repentinamente de las tiendas online sin una explicación que convenciera a su fanaticada que aún lo demandaba y veneraba.

Pues a 10 años del estreno film y el juego, Bryan Lee O'Malley publica en su cuenta de Twitter: "Ubisoft me contactó" y el Internet se cayó de la reacción explosiva de los gamers y fans del comic de culto que nunca perdieron la esperanza de ver retornar el videojuego. Ubisoft revive el clásico Arcade con Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition en pleno ocaso de las consolas de la generación anterior con gran fanfarria y hasta con una edición especial física. Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition es un aire fresco para quienes amamos este tipo de juegos, y me contradigo preguntándome por qué no le paré pelotas cuando salió por primera vez hace una década.

Este juego es una delicia, pura diversión, en especial si viviste esa gloriosa época de las salas de Arcades donde tus bolsillos se encogían por culpa de este tipo de videojuegos. Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition tiene un diseño complejo con un profundo y articulado gameplay que invita a múltiples rejugadas, sólo o en compañía cooperativa con amigos, y en tres tipos de dificultades. Los controles son simples, pero cargados de combinaciones y power-ups para diversificar el reto presente en cada nivel. Al mejor estilo de un mundo de Super Mario, comienzas en un mapa por "mundos", cada uno con su propio jefe al final para poder progresar y pasar al siguiente nivel.

El progreso del juego está relacionado con la trama del film, donde tienes a un chico llamado Scott Pilgrim, bajista de una mediocre banda de su barrio, que se enamora de una chica llamada Ramona Flowers y colorín colora… ¡nah! ahí no termina el cuento y no sería suficiente para hacer de la narrativa o la temática algo interesante, en especial si proviene de un comic de culto, porque lo que subyace es demencial como muy divertido. Para estar tranquilo con su nueva novia, Scott deberá enfrentarse en un duelo corporal contra los siete (malignos) ex-novios de Ramona, cada uno con habilidades y personalidades distintas. Nótese la palabra "maligno" ya que estos hijos de puta se enorgullecen de ser malvados a costa de caer en un estereotipado cliché.

En cada nivel peleas contra hordas de enemigos comunes y diversos que atacan de todos los ángulos y abruman en grupo. Los mecánicas de ataque son básicos al comienzo, ya que irás desbloqueando niveles de experiencia a medida que acumulas puntos de XP; donde en cada nivel alcanzado agregas una nueva habilidad a tu arsenal de movimientos. Pero eso no es todo ni es suficiente, porque hay unos atributos tipo estadísticas de RPG que incluye fuerza, resistencia, velocidad y ataque; los cuales puedes ir nutriendo comprando atuendos o alimentos en las diversas tiendas por doquier, sólo que algunas están bien escondidas. Los atuendos ayudan a fortalecer estos atributos con mayor ganancia que las comidas y bebidas. Sin embargo son mas costosas.

¿Y cómo obtienes eso? Pues con las monedas que recoges de los enemigos abatidos y lo que ganas al final de cada jefe vencido junto a todo el XP acumulado de ese mundo. Sólo tienes dos indicadores, tu vida en forma de Heart Points y tu habilidad en forma de Guts Points. Si se acaban tus HP, pierdes una vida –de las tres que tienes– y es Game Over si las pierdes todas. Si agotas los GP, no podrás ejecutar tu super habilidad particular. Pero se pueden recarcar en las tiendas consumiendo productos. Puedes llevar un "snack" que te devuelve algo de HP, pero sólo puedes llevar uno a la vez.

En los mundos el combate es simple, golpear, golpear y golpear. Usando los combos que desbloqueas con cada nuevo nivel alcanzado. Sin embargo hay armas y objetos que puedes recoger, armas contundentes como bates, paraguas, tubos, palos y cuanta cosa se te ocurra o encuentres. Estos objetos interactivos se pueden lanzar contra tus enemigos y hasta los puedes atajar si te los lanzan a ti. Hasta puedes cargar enemigos abatidos y usarlos de objeto contundente como también lanzarlos. Hay movimientos especiales que requiere que estés cerca del oponente. Como hay oponentes que disparan fuego. Todo ataque se puede esquivar o bloquear, pero a veces se te olvida en medio del frenesí y el caos de una horda queriendo un pedazo tuyo.

Hay subniveles ocultos lisérgicos donde Scott entra en una dimensión especial que pareciera que el juego entró en un glitch epiléptico. Es un pasaje sin combate en la que puedes aprovechar de recolectar la mayor cantidad de monedas ocultas en cajas o en… cerdos voladores, no leí el comic, no pregunten.

En el co-op es donde el juego se pone aún mejor. Con cuatro jugadores el caos es intenso y recomiendo subir la dificultad al máximo para mayor reto y balance. Hay poderes especiales en grupo, como activar la banda de Scott si todos activan su power-up al mismo tiempo. Así que hay contenido especil para el modo co-op que incluye los personajes adicionales que originalmente fueron parte del contenido del DLC.

Desafortunadamente no todo es perfecto y Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition es tan vieja escuela que para jugar multijugador co-op debe ser local, como en los Arcades, ya que no hay modo online. Peor aún, hay una falla que considero sagrada y fundamental en este tipo de juego. En los Arcades, así haya comenzado una partida, cualquier jugador se podía unir si había un módulo sin usar en el gabinete, es decir, si habían tres jugando de los cuatro posibles, ese jugador se unía automáticamente con insertar la moneda en su módulo y presionaba start. Algo elemental en todo Arcade multiplayer.

Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition pierde esta preciosa oportunidad al evitar que otro jugador se sume en medio de una partida, con activar otro control adicional en la consola. Hay que seleccionar a los jugadores de la partida antes de comenzar.

Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition es toda una belleza gráfica retro 16-bit, los colores y animaciones de sus sprites pixelados sin aliasing o remaster (como hicieron con Full Trottle), para dar una experiencia auténtica de un Arcade de los 90. La calidad de todo el arte es de admirar, fiel a los dibujos del comic. El audio es pure-MIDI excelsior, sumado al soundtrack acelerado de Anamanaguchi que recuerda la epilepsia auditiva que inducían los gabinetes saturados de las salas tragamonedas con su loop eterno y estridente. Sólo falta la ranura para las monedas y la madera a los lados del TV con tus manos sobre el panel de la palanca y los botones. Usar un gamepad se siente sacrílego.

Scott Pilgrim vs. The World Complete Edition es todo un juegazo de clásico brawler Arcade con horas infinitas de diversión, en especial si usas los modos adicionales de Battle Royale y Hordas de Zombies, para disfrutar en una fiesta con amigos o como quieras.

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Bart

Copia de prensa proporcionada por cortesía de Ubisoft.