Con trampita se tripea mas
Hablar del Dr. Jorgito Clooney es hablar de uno de los artistas más completos en Hollywood -polifacéticamente hablando- desde Clint Eastwood. Muchos actores se han dado la tarea de iniciarse como Directores que pocas veces o casi nunca repiten al éxito obtenido frente a las cámaras. Como dijimos, Clint Eastwood siendo de los pocos que se han probado -quizás- más como Director que como actor constituye un ejemplo poco común dentro de la industria del cine. George Clooney (Good Night and Good Luck, Syriana, Micheal Clayton, Burn After Reading) siendo el ejemplo más reciente donde un artista domina un balanceado éxito atendiendo la actuación y la dirección por igual, demostrando un potencial que hay que seguir con detenimiento. Sólo le falta cantar para ser el Sinatra contemporáneo. Sin embargo, no todos los esfuerzos como Director resultan exitosos sin un argumento sólido que acompañe el despliegue técnico de las habilidades como Director. Tal es el caso de Leatherheads, el más reciente film de Clooney que, sin ser una mala película, fracasa en su intento por mostrarse como una comedia romántica (como odio ese término casposo), por mas arrecha que sea la dirección.
Leatherheads no pretende ser un film que determina las artes escénicas como su prima donna Good Night and Good Luck que le dio todos los laureles y lo puso en la mirada crítica que hoy goza como Director. Pero tampoco refleja que aquel excelente film fue un "one hit wonder". Leatherheads es quizás un ensayo de Clooney para diversificarse sin que lo encasillen como Director de dramas al presentar una comedia romántica aunque el resultado final fue más trivial que indeleble. De nuevo, sus dotes artísticos detrás de la técnica como fotógrafo relucen demostrando que no es ningún amateur, o hace años que dejó de serlo. Leatherheads posee una de las fotografías más impresionantes con el acabado ambiental de los años de la depresión más exactos que he visto en mucho tiempo. En sí, supera a la atmósfera simplista pero bien hecha del mismo período en la excelente y sorpresiva The Greatest Game Ever Played (de otro actor que debuta como Director: Bill Paxton). Pero el guión flojo y las actuaciones de sit-com mancharon lo que pudo ser una buena película con efectos memorables como el film de Paxton.
Como sinopsis, Leatherheads plantea una situación ficticia en los anales del florecimiento del Football Americano en los tiempos de la gran depresión de 1929. Tiempos en que el deporte era mal visto, con repudiada reputación en el campo profesional, donde sólo se le consideraba como deporte de Universidades prestigiosas. Para finales de la década de los '20 sólo el Golf y el Béisbol gozaban de prestigio profesional y soporte financiero para atraer masas. El Football profesional estaba en crisis de extinguirse debido a que la depresión obligó a muchos de sus jugadores y dueños de equipos a trabajar para sustentarse. Clooney aprovecha un escándalo social que involucra a un ex-jugador Universitario exitoso, un oportunista financiero y una reportera sin ética para promover y rescatar a un deporte en vísperas de retiro (y su propio retiro). Encontrándose en medio de una transición donde el Football Profesional no sería visto como actividad del proletariado, adquiriendo el prestigio que goza en las Universidades importantes, implementando una serie de reglas que acabaría con las informalidades que daba la chispa al deporte de la vieja escuela: La Trampa. A decir verdad, como guión y película, The Greatest Game Ever Played la supera sin quedarse muy atrás en dirección para darle mérito justo a Paxton.
El guión no funciona, la dirección sí. Las actuaciones por otra parte tampoco dan ni frío ni calor, con Clooney haciendo de las veces de un Danny Ocean para ser un jugador de football de segunda en años avanzados con un gusto por la bebida y los bares de coñazas. La que nunca me termina de gustar porque la veo mas falsa Zeitan con Diccionario, Renée Zellweger, actúa exactamente igual que en todas sus insulsas películas (el Diario de la Puta Jones con el acento inglés mas chimbo que Zeitan oyendo Vico C). Al menos hay soporte con grandes calibres como Jonathan Pryce (Ronin, Pirates of the Caribbean, Brazil) que complementa la actuación de Clooney y del chamo de la serie The Office (gringa) John Krasinski, que aquí demostró que tiene madera para actuar. El DVD sin embargo es una referencia en imagen, tanto que me sorprende lo bien que siguen saliendo estos discos que no se rinden por su gran calidad de definición, como que no son tan de cachifas y vigilantes ¿verdad? ¿El sonido? ahí-ahí.
Pasable pero no memorable, para alquilar o ver en cable.
Film: Pasta; Video: Sir William McKay; Sonido: Pasta
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Barton
