"Acta Non Verba"
Sí, nos encantan los juegos de guerra, por eso los van a seguir viendo por esta columna, es que no nos cansamos y nunca tenemos suficiente. ¡No cambien el canal! que este juego es distinto, muy original y que puede resultar atractivo incluso a quienes les resulta antagónicos los juegos de recreación bélica (plomo).
Battlefield: Bad Company es la segunda entrega de la exitoso juego "Battlefield" que intenta simular grandes campos de batalla estratégicos con un extenso número de jugadores en línea; sólo que para la generación actual de consolas, debuta con la modalidad añadida de una historia de primera persona con trama y personajes identificables. Como sucede con todos los títulos que continúa su legado sin importar las generaciones de consolas, Battlefield: Bad Company estrena motor físico / gráfico con "Frostbite", un novedoso motor que añade particularidades que mejoran la percepción de realismo por encima de conceptos anteriores: Ambientes destructibles (todo), inmensa escenografía abierta no-lineal y una orquestación sonora dinámica e hyper-realista. Todo dentro del concepto original de combate abierto a gran escala y una bien llevada trama para la campaña en solitario. Aunque simple y corta, la trama recuerda a films como Three Kings y Jarhead por lo humorístico y trivial que puede ser la guerra si se le ve con otra óptica.
Tema: Tu eres Preston Marlowe, un piloto de helicóptero que se metió en un peo de corte marcial por estrellar un Black Hawk (UH-60) sobre el carro de un general -bajo efectos del alcohol cabe resaltar. En lugar de enviarte a prisión, fuiste transferido -con respectiva degradación de rango- a la compañía B-1-C conocida como "Bad Company". Rayada como la letrina del ejército donde ponen a todos los deshonrosos de mal comportamiento y pésimo desempeño; es decir, a los "desechables en combate", los "carne de cañón" que van al frente antes que los cuerpos elite. La taza de mortandad es alta en B-Company por lo que te puedes considerar como sentenciado a muerte de manera extraoficial. Eso no es lo peor de todo, en tu escuadrón te acompañan tres "sujetos" muy particulares:
George "Gordon" Haggard Jr. es un piromaniaco, "experto" en explosivos aunque más en hacer explotar todo lo que se le atraviesa (lo metieron ahí por "jugar con granadas como triqui-traquis" para jugarle bromitas a los oficiales). Con un coeficiente intelectual menor al número de balas en un peine de una Colt 1911 y de cultura red-neck campesina, Haggard es "el pana" que quieres tener al lado en combate. El otro es Terrence Sweetwater un intelectual medio cobarde que se enlistó en el ejército por el plan de becas universitarias, pero que nunca pensó que lo pondrían a pelear de verdad; pidiendo ser transferido todos los días y con más sentido común que los demás. El Sargento Samuel D. Redford es el único que no fue castigado a esa división, más bien se ofreció de voluntario a cambio de dejarlo ir antes para retirarse a pescar en tu tierra, pero su actitud de "mal culo" te provoca "retirarlo" antes de lo que realmente le toca pero con un balazo en lugar de una medalla.
Metan a eso un conflicto ficticio entre mercenarios y rusos en un país separatista, con un botín de oro para el primero que llegue -vivo- y tienes la trama. Asistidos por una ex-conejita Playboy como coordinadora de comunicaciones y completas el reparto, que está lleno de risas y carcajadas por la cantidad de comentarios y reacciones de los personajes de principio a fin. ¿Típica trama de guerra no?
Jugabilidad: La jugabilidad es como la de cualquier juego de guerra en primera persona, apuntas, disparas, segundo disparo, arrojas granadas, corres y controlas otras herramientas como ametralladoras fijas y vehículos. Lo que separa a Battlefield: Bad Company del montón es su inmensa interacción dinámica con el ambiente, y cuando digo "inmenso" lo digo en serio. ¡Aquí los mapas son grandes, enormes, increíblemente abiertos! Con respecto a la interactividad con éste me refería a que no está pintado de adorno como la mayoría de los escenarios de los juegos. Es decir, todo es interactivo, más allá de recoger objetos y movilizarlos como en Half-Life 2, aquí las casas, vehículos, estructuras, vegetación, en fin, todo, es destructible. No te sirve de mucho esconderte, todo vuela en pedazos. La inteligencia del enemigo lo sabe así que no te confíes. Los controles son tan intuitivos como el Call of Duty pero con ligeras variantes. La vida se refresca con una interminables inyecciones de "nitrilin"; la libertad sobre el uso de vehículos es total, no estás restringido como artillero de un C-5 Galaxy, un CH-47 Chinook o un UH-60 Black Hawk como en el CoD 4; aquí puedes pilotear toda clase de vehículos rusos, (tierra, agua o aire), vas a donde quieras y hasta cambias de vista de tercera persona a primera persona y de asiento para cubrir de artillero.
Artilugios de contorno sirven para romper la monotonía del rifle, como lanza misiles, guía láser para misiles aire-tierra anti-tanques, C-4, soporte aéreo y hasta herramientas para reparar vehículos dañados, ¿dime si no pensaron en todo? Tus compañeros son tan inmortales como útiles ("I'm OK, thanks for asking!"), el enemigo es pila y las balas son tan efímeras como escasas. Administra bien tus recursos. Recursos que encuentras a tu paso -como armamento y equipos- que ganan puntos como coleccionables y que amenizan el dinamismo de juego con distinto desempeño de fuego como debe ser. Aparte de recolectar maletines con oro que alimenta el motiff de su trama simplista y ligera. El juego en red es muy básico aunque interesante, no copia el sand-box arena de todos contra todos de la mayoría de los FPS. Más bien implementa la estratega como norte, al usar mapas inmensos y un gran número de jugadores con tareas específicas y vehículos, para atacar o defender objetivos en una única modalidad: Attack & Defend. Pero prometieron añadir más modalidades de juego en red en futuros downloads gratuitos.
Presentación: La presentación gráfica y sonora es cinco estrellas. Aunque no va a establecer marcas ni a imponer esquemas en esta generación como lo hizo Call of Duty 4: Modern Warfare, ciertamente merece su medalla al llevar las cosas por un grado más y arriesgarse a hacer lo que otros no han logrado antes.
A 720p todo el entorno se ve realista aunque no de carácter fotográfico. Pero es la destructibilidad del gameplay que acompaña el entorno gráfico para imprimirle ese realismo palpable al ambiente. El motor Frostbite se encarga de la simulación abierta de los mapas, árboles se mueven, se caen al explotar minas y granadas, la luz del sol cambia con la perspectiva y el entorno (excelente aplicación de vertex shaders), el humo, la perspectiva de campo visual, el agua, reflejos, etc. Los colores es mi única queja, la apariencia de colores lavados para darle ese toque de film a lo "Saving Private Ryan" casi da la impresión que los escenarios son monocromáticos, que a veces ocultan al enemigo y su artillería mejor de lo que quisiera. Súmale el granulo de film para simular... eeeeh film, y encontrarás los gráficos de Bad Company algo difícil de leer. Por fortuna la física es quasi-perfecta, así que exploten todo lo que quieran porque van a gozar una bola con la calidad y la simulación de los objetos cuando vuelan en pedazos. Ni lo tanques son invulnerables.
El sonido por otra parte es un trabajo digno de resaltar, superando a Call of Duty en cuanto a la reacción del sonido con el entorno. Ecos retumbantes y ensordecedores te asaltan por todo el 5.1 si disparas a puertas cerradas, en un sótano o en el interior de cualquier edificación. Disparas a campo abierto y la reverberación distante del plomazo te engaña si cierras los ojos. Quizás no samplearon cada sonido directamente de su arma correspondiente como hicieron el CoD 4, pero la ambientación sonora bien compensa el esfuerzo. La animación facial y la actuación vocal estuvo suprema, de hecho fue lo que le dio el carácter y la personalidad original al juego cuyo humor es tan importante como el combate ("Truck-a-Saurus Rex here I come!").
En definitiva Battlefield: Bad Company es una sólida apuesta tanto para quienes no tienen suficiente de los juegos de guerra, como para quienes están hasta los huevos de ellos. Su excelente simulación física, realismo gráfico, jugabilidad entretenida, tema simplista, humor ligero y acción variable hacen de este juego una compra segura y una sólida recomendación para los usuarios de la generación actual de consolas. Su opción en red cuesta acostumbrarse si se viene con sobredosis de Call of Duty 4, pero si aumentan las opciones de juego en futuros parches, entonces tenemos un ganador y un título de rigor para tu juegoteca. Altamente recomendable.
Jugabilidad: Willy McKay (★★★★★)
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Presentación: Willy McKay (★★★★★)
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Tema: Pasta (★★★☆☆)
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Multiplayer: McKay (★★★★☆)
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¿60$?: Claro que sí.
[PS3: 2008. 1-Disco (Blu-ray). Zona 1. Video HD: 720p. Sonido: Dolby Digital E 5.1, Jugadores: 1 (on-line: 2-24), Online: (multiplayer); Disco: 300MB, Dual-Shock Compatible, ESRB Rating: M]
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Barton